A la orden de Jehová, camina.
Cuando Faraón se acercó, los hijos de Israel alzaron sus ojos, y vieron que los egipcios venían tras ellos. Por esto los hijos de Israel temieron grandemente, y clamaron a Jehová. Éx 14:10
Y dijeron a Moisés: ¿No había sepulcros en Egipto, que nos has sacado para que
muramos en el desierto? ¿Por qué has hecho con nosotros así, que nos has sacado
de Egipto? Éx 14:11
¿No es esto lo que te hablamos en Egipto, diciendo: ¿Déjanos servir a los
egipcios? Porque mejor será servir a los egipcios, que morir nosotros en el
desierto. Éx 14:12
Moisés dijo al pueblo: No teman; estén firmes, y vean la salvación que Jehová
hará hoy con vosotros. Porque los egipcios que hoy han visto, nunca más para
siempre los verán. Éx 14:13
Jehová peleará por ustedes, y ustedes estarán tranquilos. Éx 14:14
Entonces Jehová dijo a Moisés: ¿Por qué clamas a mí? Di a los hijos de Israel
que marchen. Éx 14:15
Camina, porque Dios ya ha dado la orden de caminar.
Te ha guiado.
Hay momentos que debes caminar, en función de la orden que te ha dado Jehová. ¿Cómo? A través de su Espíritu y a través de su palabra.
El pueblo ya había recibido la orden de irse, de marchar. Si retrocedía caería en las manos de Faraón. Por tanto, su deber era marchar. Por esta razón Dios le dice a Moisés, porque clamas a mí. Pero quien clamo fue el pueblo. Y parece que Moisés alienta al pueblo, y Jehová lo ve como un clamor de Moisés. Y le dice, dile al pueblo que marche. Era el líder guiado por Dios, que recibe la orden. Aunque el pueblo fue el que clamó, Moisés debería dar la orden: Marchen. No alentarlos, porque era un hecho, lo que Dios hizo, de sacarlos de Egipto.
Así nos encontramos en algunos momentos, clamando por algo que Dios hizo, ha dicho, sucederá, lo tendrás. ¿Qué debemos hacer? Marchar, ir, acudir. Y encontramos a un líder en medio del peligro, dando aliento. En vez de decir: Marchen, ya Jehová los ha salvado. Porque ya los había sacado de Egipto. Los había libertado. Los había salvado.
Ante lo desconocido, pero según la orden de Dios. Vayamos, emprendamos el camino. Hagamos conforme lo ordenado por Dios. Obedezcamos los que ya nos ha dicho. Caminemos, y marchemos. Emprendamos el camino, según nos ha ordenado, según nos ha anunciado. Trabajemos en función de esa, guía que nos ha dado.
Oración: Guíame Espíritu Santo para cumplir los propósitos que Jesús, tienes con nosotros cada día.
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